Los compañeros de mesa los han imitado y a mí no me ha quedado más remedio que hacer un dibujo en la pizarra.
Sólo he hecho el dibujo dos veces y ya vereis lo que ellos solos han conseguido.
Cada vez que dibujo la cara en la pizarra, todos me dicen: ¡seño que faltan cosas!, ¡seño el cuello!, ¡seño las piernas..!.... En fin... que al final sin quererlo nos dibujamos practicamente enteros.
Además ya podeis apreciar como van copiando su nombre. Algunos mejor, otros peor, algunos hacen las letras al revés, otros se comen algunas letras, otros aún lo escriben a su manera.... todo es normal y todo está bien, pues estamos comenzando.
Gracias por vuestra colaboración
Es una maravilla ver su progreso. Gracias Soledad.
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